Cuando el gnóstico ha llevado un récord sobre sus sueños, incuestionablemente descubre al sueño que siempre se repite; éste, entre otros, es ciertamente un motivo más que suficiente para anotar en el cuaderno o libreta a todos los sueños.
Indubitablemente, la experiencia onírica siempre repetida es el elemento iniciador que, inteligentemente utilizado, nos conduce al despertar de la consciencia.
Cada vez que el místico acostado en su cama se adormece intencionalmente, meditando en el elemento iniciador, el resultado jamás se hace esperar demasiado. Por lo común, el anacoreta revive tal sueño conscientemente, pudiéndose separar de la escena a voluntad para viajar por los mundos suprasensibles.
Cualquier otro sueño puede también ser usado con tal propósito cuando realmente conocemos la técnica. Quien despierta de un sueño puede proseguir con el mismo intencionalmente si éste es su deseo. En este caso, debe dormirse nuevamente reviviendo su experiencia onírica con la imaginación. No se trata de imaginar que nos estamos imaginando, lo fundamental consiste en revivir el sueño con todo su crudo realismo anterior. Repetir intencionalmente el sueño es el primer paso hacia el despertar de la consciencia; separarse a voluntad del sueño y en pleno drama, es el segundo paso....
https://www.jesusagrario.com/paginas/suenos/significado/onirica.html