Si en un platillo de la balanza cósmica ponemos las buenas acciones y en la otra las malas y éstas últimas pesan más, es claro que la balanza se inclinara en nuestra contra, produciendo amarguras, más si ponemos buenas obras en el platillo del bien, podemos inclinar la balanza a nuestro favor, entonces nuestra suerte mejorará notablemente.
Quien tiene capital para pagar, paga y sale bien en los negocios, quien no tiene capital debe pagar con dolor.
La justicia divina está más allá del bien y del mal, hay quienes confunden esta ley cósmica con el determinismo y aún con el fatalismo, al creer que todo lo que le ocurre al hombre en la vida está determinado, es cierto que los actos del hombre están determinados por la herencia, educación y el medio ambiente, pero también el hombre puede modificar sus actos: educar su carácter, formar hábitos superiores, combatir debilidades, fortalecer virtudes, etc.
Los factores de la herencia están en los genes, esta palabra se deriva de la raíz griega de donde nacen las palabras génesis, generar, género, estos genes están dentro de los cromosomas. Para ver más hacer CLICK aquí